mayo 23, 2016

Jezabel Martínez publica “Geometría Sagrada”

Ser mujer y joven son ingredientes que dificultan el abrirse camino en el campo de la cultura. El cine, la pintura, la literatura, la música siguen siendo territorios de dominación masculina si tomamos como referencia el porcentaje de obras hechas por mujeres que encuentran hueco y son reconocidas en museos, festivales, certámenes, carteles y suplementos culturales. Pero, a pesar de los períodos de prohibición directa, y de los prejuicios, estereotipos y trabas que hasta hoy se arrastran, las mujeres crean y consiguen que se escuchen sus voces, sus instrumentos y su música. Jezabel Martínez lleva años componiendo, tocando el violín y realizando proyectos que combinan música, artes plásticas y artes visuales. Acaba de publicar ‘Geometría Sagrada’, doce composiciones de música minimalista, inspirada e inspiradora.



Háblanos del disco. ¿Cómo ha sido el proceso de creación? ¿Cuáles son las características más significativas?

Ha sido un proceso muy largo, de dos años, en los que he trabajado yo sola, hasta poder completar los doce temas. Es un trabajo laborioso, desde que tengo la melodía en la cabeza, hasta que lo plasmo en una composición que normalmente está pensada para cuarteto de cuerda con piano, a lo que he ido añadiendo algún sintetizador, algún instrumento étnico, alguna campana….Es una mezcla extraña. Lo que quiero transmitir es una sensación de armonía. Si tuviera que definir el estilo es música minimalista (aunque a veces se sale un poco), es un estilo que me gusta mucho porque está basado en las matemáticas y en la geometría sagrada, como por ejemplo los fractales: una idea melódica básica que se va desarrollando y variando sutilmente, se va transformando hasta que da la sensación de desaparecer, un patrón que se va repitiendo y a la vez encajando en otros patrones y van creando otra idea nueva, pero basada en las ideas anteriores. Me gustó esa idea, la geometría sagrada está en todas partes, la matemática está en todas partes y eso te hace sentir como una pertenencia al Todo y eso es la armonía suprema. A través de la matemática hay una conexión universal.

De hecho, los títulos de los temas van definiendo esta temática.

Sí, está todo muy pensado. Son doce temas (bueno, en la edición física son trece, viene uno de regalo) pensados como una estructura de concierto clásico, cuatro conciertos con tres movimientos cada concierto, como latidos de un corazón. Por una parte, elementos de la geometría sagrada más básicos –como la esfera, la espiral -, los fractales, luego la parte de los números – donde encontramos las piezas como número pi, número áureo y sucesión de Fibonacci-, y el último concierto, que está basado en elementos de la geometría sagrada con tintes más ocultistas –que está en nuestra mitología ancestral, desde Grecia, la cábala hebrea, hasta la actualidad, incluso en el símbolos paganos que se apropió el cristianismo-. El Metatrón, la Flor de la vida, que son cuerpos geométricos bastante complejos, el Vesica Piscis, que es un símbolo pagano de la Antigüedad que representa la unión de lo masculino y lo femenino y la fuerza primigenia de la mujer, es supermatriarcal –dos círculos que se unen y componen un óvalo en el centro que representa desde la vagina femenina, la fertilidad, muchas cosas y que después se apropió el cristianismo-.


¿Cómo haces la traducción de todo esto a la música?

Depende. Hay temas en los que resulta más fácil, por ejemplo con los números puedo seguir la frecuencia utilizando los intervalos, ya que la música es matemática y está estructurada en intervalos y acordes. Luego hay otros temas más libres, según lo que me inspiraba.

La inspiración me acompañó desde el principio del proceso. Lo que me dio el empujón definitivo para decidirme a crear este CD, fue que una noche soñé un tema prácticamente entero –algo que le sucede a muchos músicos-, fue Espiral (el número dos del disco), me pareció algo muy especial, me levanté corriendo para escribir la partitura, y decidí seguir. Es algo distinto a lo que había hecho hasta ahora, que ha sido sobre todo música para bandas sonoras de cortos…

Búsqueda de inspiración y armonía

¿Cómo buscas la inspiración?

Tuve un profesor que siempre decía “que la inspiración te pille trabajando” y es así. Hay una búsqueda previa y luego, cuando menos te lo esperas, llega, a veces haciendo otras cosas…Por ejemplo, aunque tiene muy poco glamour, batiendo un huevo (risas), como tiene un ritmo, dejas la mente vacía y te empiezan a llegar cosas.

Es una música que transmite paz y que tú recomiendas para inspirarse. ¿A qué crees que se debe?

Es un conjunto muy armónico, no hay disonancia, su estructura cíclica va llevando a un estado de relax, esta estructura cíclica, de ritmo, es la que han utilizado los chamanes de distintas culturas para llegar al trance. Algunas artistas se han descargado el disco y les ha ayudado a estimular la creatividad.

¿Cómo defines la armonía?

La armonía es un estado, un estado físico y mental que te hace entrar en un equilibrio, en una coherencia. Esta música es armónica porque te hace entrar en un estado de paz que te hace entrar en conexión con todo, con el universo. Cuando entras en armonía te conectas con todo, desde lo más pequeño hasta el universo. Comprendes que todo está relacionado: la música es matemática y la matemática es música, y la música es vibración, por tanto puedes encontrar música en todas las formas vivientes y no vivientes del universo. Lo que quería conseguir con esta música es la sensación de sentirse Uno con Todo, y que las personas que lo escuchen sientan esa conexión con la armonía.

El disco está grabado en 432Hz en lugar de los normales 440Hz que utiliza la música que habitualmente escuchamos. Has escrito incluso un artículo sobre el tema. ¿De dónde te surge esta búsqueda?

Esto de la afinación a 432Hz es un tema controvertido. La idea de la sincronización con la frecuencia de la Tierra no es absoluto mía y yo todavía no puedo aportar nada concluyente, definitivo. He hecho varios experimentos con esta afinación, de momento sin conclusiones concretas, y este disco es en parte un experimento más, por eso decidí afinar todos los temas desde el principio a 432Hz. para ver qué efectos provocaba. Es una afinación un pelín más grave, casi no se nota.

La música no tiene género, discriminar la música compuesta por mujeres obedece a razones culturales

Haces muchas cosas: compones música, tocas el violín, eres actriz, haces fotografía ¿Es más difícil siendo mujer?

Sí, mucho más. Me he ido haciendo un hueco en el mundo del cortometraje con mucho esfuerzo. Siempre he sentido que los directores con los que he trabajado respetaban mi trabajo. Pero avanzar, dar el salto al largometraje, está siendo duro. No es un tema personal mío o de unos directores o de unas compañías en concreto, es una estructura que a las mujeres nos lo pone más difícil. Nos pasa a las músicas, pero también a las cineastas, a las artistas en general.

¿A qué se debe?

No sabría decirte una causa concreta. Para mí la música no tiene género, es intangible, es una creación de la mente. Por tanto, hacer diferencias y discriminar la música compuesta por mujeres obedece a razones culturales. Pasa en muchos campos, fíjate en la cocina, las mujeres llevamos siglos cocinando y ahora que está de moda, se conocen sobre todo cocineros. Lo cierto es que ser compositora implica aguantar puertas que se te cierran en las narices en sectores todavía muy masculinos y tener que demostrar incansablemente que tu trabajo es de calidad. Claro que hay compañeros que apoyan y también iniciativas que están ayudando a darnos visibilidad.



Efectivamente, conocemos a pocas compositoras…

Sí, efectivamente a lo largo de la historia ha habido menos compositoras que compositores, por una razón sencilla: a las mujeres se les apartaba de la música, se les negaba el acceso al conocimiento. Pero en familias donde existía tradición musical, hubo mujeres que compusieron y tocaron música. De hecho, se han alabado obras de Mozart que posteriormente se descubrió que había compuesto su hermana Nannerl, y lo mismo pasó con Félix Mendelssohn y su hermana Fanny, directamente su hermano se las robó. También es destacable la compositora Hildegard de Bingen (1098-1179), una mujer adelantada a su tiempo…

Tú estás en colectivos que se dedican a visibilizar la obra de las mujeres artistas. Háblanos de estos colectivos y de sus propuestas.

Parece mentira que en pleno siglo XXI nos sigan discriminando. Así que hay que asociarse, unirse, luchar juntas. Estoy en el colectivo “Generando Arte”, un colectivo de mujeres artistas unidas para a través de nuestras exposiciones visibilizar que las mujeres existimos, en cualquier categoría, y denunciar el maltrato, la discriminación en el mercado laboral, y un montón de temas -cada exposición es temática-. También formo parte del ‘Club de las 25’, soy socia y colaboradora. Hacemos reuniones mensuales en las que invitamos a una mujer, que puede ser de cualquier ámbito, la cultura, la política, la medicina. Por ejemplo, en la última invitamos a las responsables de Igualdad de los distintos partidos políticos. Debatimos y proponemos ideas para mejorar la situación de las mujeres.

  • Para descargar el CD Sacred geometry: Pulsa aquí
  • Para más información sobre la compositora y su trabajo: pulsa aquí

Fuente: Amecopress

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