Fundación Mujeres por África
La fístula obstétrica es quizás una de las formas de violencia contra las mujeres más invisibilizada, pese a que, según cifras de Naciones Unidas, entre dos y tres millones de mujeres en el mundo la sufren. Y su erradicación se ha convertido en una gran deuda pendiente que se recuerda cada 23 de mayo, Día Internacional para la Erradicación de la Fístula Obstétrica.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) ha señalado a la fístula obstétrica como una de las lesiones más graves y trágicas que pueden ocurrir durante el parto. Se trata de un orificio entre el canal del parto y la vejiga o el recto causado por la prolongación u obstrucción de un parto sin recibir el tratamiento médico oportuno.
A consecuencia de esta lesión, las mujeres no tienen control de la orina, las heces o ambas, y con el paso del tiempo deriva en afecciones médicas crónicas, depresión, aislamiento social y una profundización de la pobreza.
Un vídeo para concienciar
Para crear conciencia sobre esta dolencia, la fundación Mujeres por África ha estrenado un corto audiovisual en el que ha querido denunciar “la enorme injusticia y el sufrimiento que soportan las mujeres que la padecen por la estigmatización de que son víctimas”.
Según datos de UNFPA, cientos de miles de mujeres y niñas en África Subsahariana, Asia, la región árabe, América Latina y el Caribe viven con esta lesión y cada año se producen nuevos casos. Sin embargo, las mujeres africanas han sido las más afectadas.
“A pesar de estos datos, la fístula se puede prevenir casi en su totalidad. Su persistencia es un indicio de desigualdad en el ámbito mundial, y de que los sistemas de salud no protegen los derechos humanos y de salud de las mujeres y niñas más pobres y vulnerables”, señala el organismo.
Prevenir y tratar
Este audiovisual de Mujeres por África está dentro del programa Stop Fistula, finalizado en 2019, y con el que la fundación ha buscado prevenir y brindar tratamiento a las que lo han contraído.
El proyecto Stop Fistula, ha tendido como objetivo prevenir y curar el mayor número de casos de fístula a través de una triple actuación: la de carácter preventivo, a través de actividades de sensibilización, y facilitando el acceso a las consultas antenatales y la atención al parto a las mujeres más vulnerables. En especial, niñas y jóvenes menores de 20 años que dan a luz a su primer hijo, y aquellas que presentan parto estacionado u obstruido
La segunda línea es la actuación reparadora se opera a las mujeres que ya padecen la fístula. En ambos casos, la asistencia médico-sanitaria es totalmente gratuita. Y el tercer eje que consiste en la formación de personal sanitario local.
Dentro de este proyecto se han realizado 7 misiones quirúrgicas en las que se ha operado a 196 mujeres, se han atendido más de 4.000 partos y se han llevado a cabo más de 20.000 consultas antenatales.
La fístula obstétrica y la COVID-19
“La prevención es fundamental para erradicar la fístula”, ha recalcado UNFPA, una acción en la que la asistencia cualificada y oportuna ha sido fundamental, pero que se ha visto afectada por la llegada de la COVID-19.
“Estos asuntos se verán seguramente exacerbados por el coronavirus puesto que a los sistemas de salud les costará responder a la pandemia, y los servicios de salud sexual y reproductiva están a riesgo de ser marginados”, ha explicado la organización.
Naciones Unidas estima que la pandemia puede hacer que se lleven a cabo 13 millones de matrimonios infantiles que no se hubrían producido entre 2020 y 2030.
Si las interrupciones a los servicios de planificación familiar se mantienen durante aproximadamente 6 meses, 47 millones de mujeres en 114 países de ingresos medios y bajos se verán incapaces de usar contraceptivos modernos. Todos estos asuntos pueden afectar a la incidencia de la fistula obstétrica.
“Si se garantiza una asistencia cualificada en todos los partos y la provisión de atención obstétrica de urgencia oportuna y de alta calidad a todas las mujeres y las niñas que desarrollen complicaciones en el momento del parto, se conseguiría eliminar la fístula en los países en desarrollo casi en su totalidad, como ya ocurre en el mundo industrializado”, ha enfatizado UNFPA.
Por Cristina Bazán
Fuente: Efeminista