Cultura de la impunidad y ciudades inseguras agravan la violencia contra las mujeres en India

Foto de archivo de una protesta en apoyo de un caso de violación y asesinato en la facultad de medicina RG Kar en Calcuta, en Bangalore, India. EFE/EPA/JAGADEESH NV
La inseguridad en las ciudades, la impunidad de los agresores o la falta de políticas de prevención de violencia contra las mujeres son algunas de las causas que están detrás de la alarmante cifra de violaciones en la India, un país donde se reporta una agresión sexual cada 16 minutos, según los últimos datos recabados por varias organizaciones, y que ha vivido varios casos que han causado conmoción en el último año.
Según datos del último informe de crímenes de la India, correspondiente a 2022, este país registró 31.500 casos de violación ese año, equivalentes a unos 86 por día, muchos de ellas en las calles y edificios públicos de las masivas ciudades indias.
Calles pobremente iluminadas, parques abandonados, señalización inadecuada o falta de seguridad en las vías urbanas son algunos de los puntos que convierten estas ciudades en retos para las mujeres que las habitan.
"El miedo a la violencia contra las mujeres, la falta de intervención de testigos y la cultura general de impunidad dificultan la acción tangible o la prevención del acoso sexual, lo que se ve agravado por la infraestructura deficiente, la ausencia de patrullajes policiales y las lagunas en los mecanismos de denuncia", cuenta a EFE Jayashree Velankar, directora de la iniciativa Jagori, compuesta por diversas organizaciones y asociaciones indias e internacionales.
En el caso de Nueva Delhi -la capital india y la región metropolitana más poblada de este país asiático- la movilización comunitaria, una mayor planificación de la seguridad urbana e intervenciones policiales y de la administración son las principales recomendaciones en las que incide Jagori para reducir las cifras de violencia.

Foto de archivo de una protesta contra el acoso sexual, en Bangalore, India. EFE/Jagadeesh Nv
El caso de la violación de Calcuta
Una de las violaciones que más ha conmocionado y ha tenido eco en los medios en el último año sucedió en agosto pasado en un hospital de Calcuta, y desencadenó movilizaciones masivas por todo el país.
La víctima fue una médica de 31 años que fue violada y asesinada en el Hospital Universitario RG Kar de Calcuta el 9 de agosto, mientras estaba en un descanso de un turno de 36 horas.
Su cuerpo fue hallado con brutales heridas en un salón de reuniones del centro médico en el que trabajaba.
El caso generó protestas masivas en la India, en las que convergían dos consignas principales: la urgencia de medidas para disminuir la violencia sexual contra las mujeres, y la exigencia de un aumento de la seguridad en los hospitales para proteger a los médicos.
Las mujeres se sienten inseguras
Apenas medio año después del suceso, en enero, un tribunal de Calcuta condenó a cadena perpetua al acusado. La resolución del caso, no obstante, no es lo habitual en la India, donde muchos crímenes sexuales pasan inadvertidos, y la violación marital, por ejemplo, no es un delito penal.
"La preocupación por la seguridad es una barrera importante para las mujeres y las niñas de todas las edades en la India. A pesar de la Ley de Prevención, Prohibición y Reparación del Acoso Sexual en el Lugar de Trabajo desde 2013, el acoso sexual y las agresiones en el lugar de trabajo son factores que contribuyen a las bajas tasas de participación de las mujeres en la fuerza laboral en este país", dice Velankar.
Otro caso notorio tuvo lugar en marzo del año pasado en el estado de Jharkhand, en el este del país, cuando una turista hispanobrasileña sufrió una violación múltiple mientras su pareja, española, con quien recorría el país en motocicleta, era amenazado con un cuchillo.
Aunque los agresores fueron arrestados por la policía poco después del suceso, en el marco de una investigación previa a su juicio, no se supo más de su situación.
Prevención de la violencia contra las mujeres
Más recientemente, un autobús, convertido en símbolo de la inseguridad de las mujeres en la India tras la violación y asesinato de una joven por parte de cinco hombres en 2012 que conmocionó a la opinión pública, ha vuelto a ser un escenario de terror tras la violación el pasado 26 de febrero de una mujer de 26 años en el interior de uno de estos vehículos, cuando se encontraba estacionado.
La violencia sexual en el ámbito público, institucional y laboral es un problema persistente en la India, que con frecuencia provoca la reacción de parte de la sociedad que exige más medidas para garantizar la seguridad de las mujeres frente a un problema complejo.
"Para abordar esta situación, necesitamos sistemas de reparación sólidos y su correcta implementación, con un enfoque especial en una policía sensible al género. Poner fin a la culpabilización de las víctimas y eliminar el control social sobre el cuerpo, la sexualidad, la movilidad y las decisiones de las mujeres y las niñas son puntos cruciales de intervención", concluye Velankar.
Por Juan Verano | Nueva Delhi
Fuente-. Efeminista