La imaginación solidaria

Lucy Garrido es creativa publicitaria uruguaya, histórica en los movimientos sociales y editora del periódico feminista Cotidiano Mujer. En esta entrevista realizada en oportunidad de participar en las Jornadas Internacionales conmemorativas de los 25 años de la creación del Instituto Español de la Mujer, cuenta acerca de su incansable vocación por poner la publicidad al servicio del feminismo.

Lucy Garrido ha producido diversas campañas de comunicación social a nivel regional. Entre ellas, ''Sin las mujeres, los derechos no son humanos'' de CLADEM, ''Contra los fundamentalismos, lo fundamental es la gente'' de la Articulación Feminista MARCOSUR y ''Mujeres y hombres: ni más ni menos'' para el Plan de Equidad de la Ciudad de Montevideo.

Integra la coordinación de la Articulación Feminista MARCOSUR, de los International Feminist Dialogue, la alianza que dirige la Campaña por la Convención Interamericana de los Derechos Sexuales y los Derechos Reproductivos y coordinadora de la Campaña contra los fundamentalismos. Integra el Consejo Asesor del Semanario Brecha.

Fue también, coordinadora de Comunicación para Latinoamérica y el Caribe del proceso del Foro y la lV Conferencia sobre la Mujer de Naciones Unidas, Beijing 95. Fue evaluadora de la campaña regional de las Naciones Unidas ''Una vida sin violencia es un derecho nuestro''. Ha realizado consultorías para UNIFEM, CEPAL, PNUD, UNICEF, IIDH, CLADEM, REPEM.

-¿Cómo llegas desde la publicidad, un medio tan perverso con las mujeres, a entender que puede servir para denunciar la situación de las mujeres?

- En esto no estoy sola. Somos muchas personas creativas, también hay hombres, unos pocos compañeros que comparten la misma dirección. Estamos hartos de las empresas para las que tenemos que trabajar y de las cuales vivimos, pero al mismo tiempo hemos optado por poner nuestros esfuerzos y conocimientos en pro de los movimientos sociales. Además yo soy una feminista acérrima y a la vez creativa publicitaria. Soy, desde hace muchos años, editora del un periódico feminista que se llama Cotidiano Mujer, en Uruguay.

- ¿Las herramientas publicitarias son válidas?

- La publicidad es válida. Yo creo que haciendo las cosas como se deben hacer dan resultado. Lo que hay que tener claro es cual es el objetivo. Hay que usar lo bueno que tiene la publicidad, para subvertir los valores dominantes de la sociedad patriarcal, contra el racismo, a favor de los jóvenes, los gays. Lo bueno es usar los instrumentos que a la publicidad le vienen estupendamente y difundir nuestros valores e ideas. Hay que vender el mensaje. Busquémonos las vueltas para venderlo en positivo.

- Para ello has inventado el término ''publiganda''. ¿Que es la publiganda?

- Yo milité en el Partido Comunista de Uruguay y allí aprendí ha hacer propaganda, panfletos, etc… La combinación de las herramientas publicitarias y la propaganda es lo que hemos dado en llamar ''publiganda'': mitad publicidad y mitad propaganda. Las secuelas de hacer panfletos aburridos tienes que volverla en positivo. La actividad militante de los partidos de izquierda tiene una vertiente muy positiva que es la entrega, el creerte lo que haces y eso me ha venido muy bien para hacer lo que estoy haciendo en la actualidad. No reniego de ello para nada.

- Otra de tus características es la utilización del sentido del humor.

- Para mí es el mejor de los sentidos. Siempre me he preguntado porqué si somos feministas o de izquierdas, hemos de ser densas y aburridas. Siempre se nos ha relacionado con la creación de materiales tristes. Uno de los retos que me he marcado es añadir el sentido del humor al tema de la violencia de género.

- ¿Pero en qué medida es posible?

- El reto es ese. A la violencia no podemos encima añadirle la tristeza. Eso es lo que hemos hecho siempre; lo hemos probado durante décadas y no nos ha funcionado. El sentido del humor no tiene nada que ver con la falta de seriedad, sino todo lo contrario. Lo que hay que evitar es la densidad plomiza, la intensidad forzada. No hay nada mas serio que el humor.

- Y eso es lo que haces, por ejemplo, con tu producción en video difundida gratuitamente ''El mundo al revés es posible'', con las músicas contrastadas de ''La cucaracha'' y la canción de Jorge Drexler, ''Al otro lado del río''. En ese video están incluidos las denuncias mas candentes: el hambre, el maltrato, la intolerancia de las Iglesias, la avaricia de las grandes potencias, pero a todo le das la vuelta, les haces aparecer como ONGs al servicio de las grandes reivindicaciones.

- Si, así es. Pero esbozando una suave sonrisa que te permite ver la salida al final del túnel.

- También manifiestas que las personas con imaginación son más solidarias.

- Yo había leído en alguna publicación que las personas imaginativas tienen la piel mas tersa, que mantienen la juventud aparente más tiempo. En esto no estoy muy convencida. En lo que estoy segura es que a las personas con imaginación les cuesta menos ponerse en el lugar de las otras, tienen mas facilidad a la empatía, y que se conmueven mas con lo que pasa a su alrededor; en el fondo son mas solidarias y mas proclives a dedicar sus esfuerzos a mejorar el entorno social al que pertenecen. Esto lo que podido yo constatar a lo largo de mi vida. Estoy segura de que la imaginación nos ayudará a ir cambiando el mundo en positivo.

- ¿Y a nuestro país (por España) como lo ves?

- Me gustaría ver en España, yo soy hija de españoles, un poquito mas de relajo son demasiado serias. Yo creo que esto viene de ser un estado poco laico, muy confesional todavía.

- ¿El peso de la púrpura nos puede?

- El peso de la iglesia es alargado. Es una iglesia rancia, pasada de moda y densa que a mí como española que también soy, me avergüenza. La iglesia que no se mueve. La jerarquía eclesiástica, los obispos en la calle me horrorizan, no deja vivir a la gente libremente. Hay que sacudirse a esta gente tan terrible. Hay que volver a ese destape que tuvo la sociedad española hace 30 años que fue impresionante y que sirvió como referente a tantas feministas y progresistas a lo largo y ancho del mundo.

- ¿Y de los organismos de igualdad, mas concretamente del Instituto de la Mujer, qué referencia tienes?

- Para nosotras en América latina han sido todo un referente. Fueron ustedes las primeras y después nos fuimos mirando en su espejo. Fue un triunfo que todas nosotras allá también festejamos. Además, las mujeres que han ido encabezando estos organismos han sido muy efectivas y han conseguido con su esfuerzo y apoyadas por la ciudadanía grandes cosas impensables hace 25 años.

Por Petra Cristian

Fuente: Artemisa Noticias/AMECO Press