febrero 17, 2011

Alemania debate sobre la cuota femenina y el Deutsche Bank levanta polvareda

Kristina Schröder, ministra de Familia - treintañera, espera a su primer hijo - y la de Trabajo, Ursula von der Layen - pasados los cincuenta y madre de siete - comenzaron el debate. El ministro de Economía, Rainer Brüderle, rechazó tajantemente la posibilidad de introducir cuotas femeninas en las empresas. Angela Merkel dijo - a través de su vocero - que no quiere introducir cuotas, pero que puede ser una solución "pragmática" teniendo en el horizonte la necesidad de incrementar la presencia femenina en puestos de responsabilidad y dirección. En las cien principales empresas de Alemania las mujeres sólo representan un 3,2% de los puestos directivos.

Merkel intentó zanjar la disputa entre dos de sus ministras sobre la oportunidad o no de establecer cuotas para incrementar la presencia de mujeres en puestos directivos empresariales. "Merkel no quiere introducir cuotas, sino que desea dar a las empresas otra oportunidad para que ellas mismas incrementen la presencia de mujeres en puestos de responsabilidad y dirección", dijo su vocero. Sus socios de coalición de gobierno, los liberales del FDP, se oponen tajantemente.

Obligatoria o voluntaria

Von der Layen, consideraba la necesidad de una cuota obligatoria del 30% para las empresas. Schröder, aboga por un sistema voluntario. La situación en Alemania tiene antecedentes: Hace diez años las organizaciones empresariales alemanas accedieron a aumentar la representación de mujeres en sus cuadros dirigentes, sobre una base voluntaria. Como resultado, entre las cien principales empresas del país, las mujeres representan un 3,2% de los puestos directivos (11 puestos sobre un total de 490). Los datos fueron parte de una encuesta divulgada hace poco por el Instituto Alemán de Investigaciones Económicas (DIW).

"Merkel no quiere introducir cuotas, sino que desea dar a las empresas otra oportunidad para que ellas mismas incrementen la presencia de mujeres en puestos de responsabilidad y dirección."

Por su parte, el ministro alemán de Economía, Rainer Brüderle dijo: "Estoy seguro: las mujeres lo conseguirán sin ninguna cuota porque son buenas". Pero era tan sólo un golpe de efecto para expresar su posición: "No apoyamos las cuotas que dictan a la economía lo grande que han de ser las participaciones masculina o femenina en las juntas directivas o consejos de vigilancia".

En su opinión, en vez de imponer cuotas, el Estado debería ayudar en mayor medida a la creación de políticas familiares que permitan y favorezcan el empleo de la mujer. La ministra de Trabajo, la conservadora Ursula von der Leyen, había considerado la posibilidad de imponer una cuota mínima de mujeres en su plantilla en vista del escaso porcentaje que representan, sobre todo en los consejos de administración y supervisión de los grandes grupos, y de los escasos progresos obtenidos en ese sentido en la última década.

EON y Deutsche Bank

El presidente de Deutsche Bank (44% de mujeres en la plantilla, 16% en puestos de dirección), Joseph Ackermann, está en contra de la imposición legal de estas cuotas por género. "No hay ninguna mujer en el comité ejecutivo del Deutsche Bank, pero espero que un día u otro la dirección sea más bonita y con más colorido gracias a la integración de mujeres". La ministra de consumo, Ilse Aigner, le contestó: "A los que le gusta todo lo que suponga colorido y lo que hace bonito, lo que deben hacer es ir a pasearse al campo con las flores, o a un museo".

El Consorcio energético EON, que tiene el 11% de sus puestos directivos en manos de mujeres, se ha declarado dispuesto a doblar el nivel, según una información publicada por el diario Handelsblatt.

El 84% de los consorcios del DAX se opone a las cuotas obligatorias, según una encuesta realizada por la revista económica germana Wirtschaftswoche.

Brechas

Según el estudio del Instituto Alemán de Investigación Económica, donde consta que sólo un 27% de los cargos gerenciales en toda Alemania están ocupados por mujeres. En las universidades hay sólo un 17,4 de científicas y catedráticas.

Según Clarie Schaffnit-Chatterjee, investigadora de Deutsche Bank y autora del estudio Frauen auf Expedition - in das Jahr 2020 (Mujeres en viaje de expedición hacia el año 2020), a mayor cualificación de una mujer, peor es la remuneración en comparación a la de un hombre. La diferencia salarial asciende a un 22%, en promedio.

Fuente: Mujeres&Cia

Sí a la Diversidad Familiar!
The Blood of Fish, Published in