La Violencia tiene mil caras
En estos momentos sin duda los medios de comunicación reflejan un mayor número de casos de violencia contra la mujer. Si antes un femicidio era simplemente una nota más de la “crónica roja”, ahora el caso suele ir comentado y subrayado con referencias al problema social de las agresiones contra las mujeres, pero la tendencia es a potenciar cada vez más, el dramatismo y el victimismo. Se subraya la historia personal dando escaso margen a la información de expertos/as que podrían, junto al caso individual tratado, dar información positiva de avance, de salidas con el objetivo de que quienes estén viendo, escuchando o leyendo la noticia y se encuentren en similares situaciones, se animen a denunciar y a salir de su problema.
La violencia de género es un tema que concierne a la sociedad en su conjunto. El Estado es el primer responsable de asegurar una vida digna hacia las mujeres, entendiendo que el maltrato en todas sus expresiones es un dispositivo arraigado en la sociedad. De ahí, que el abordaje de la violencia contra las mujeres en los medios de comunicación, resulta una tarea imperiosa, tanto por su significancia en los diversos soportes comunicacionales, como la modificación de los estereotipos sociales.
A fin de permitir que las y los profesionales de la comunicación no seamos neutrales frente a un acto de violencia, la Corporación Domos en conjunto con Naciones Unidas y el SERNAM presentaron la “Guía para Profesionales y Comunicadores/as de Medios de Comunicación en Violencia contra las Mujeres”, cuyo objetivo es instalar que la violencia contra las mujeres tiene mil caras.
Según explica Ximena Rojas, experta en masculinidades de la ONG Domos, “la violencia hacia las mujeres se inserta principalmente en la estructura sociocultural, es una problemática de derechos humanos y se debe entender como una manifestación pública que involucra a terceros”.
Es por eso que, insultos, humillaciones, amenazas, golpes, quemaduras, abuso y violencia sexual; privación de libertad, acoso sexual en el trabajo y establecimientos educacionales; explotación y comercio sexual de mujeres y niñas; diversas formas de abuso a mujeres refugiadas y migrantes; violaciones masivas en conflictos armados, entre otras manifestaciones de violencia contra las mujeres, son expresiones de la posición subordinada que en el siglo XXI ocupan aún millones de mujeres en el mundo.
Esta guía para tratar los casos de violencia en los medios de comunicación nos invita a reflexionar sobre la aplicación en los diversos medios de principios generales, que definen opciones acerca de la valoración de una realidad o hechos específicos de la violencia, el mensaje utilizado, los contenidos, la forma y el lenguaje para representarlos, así como los efectos buscados en las audiencias, pueden contribuir a la creación de opinión y a la formación de públicos más críticos y reflexivos.
Por Fabiola Gutiérrez
Fuente: Observatorio de Género y Equidad