La muerte materna, una violación a los derechos humanos
Los Estados no toman medidas preventivas para evitar la muerte por causas relacionadas con el embarazo, afirma la ONU.
Durante varios años organizaciones feministas en el ámbito mundial han luchado por que la muerte materna deje de verse únicamente como un problema de salud pública y sea considerada como un asunto de derechos humanos.
Pero este clamor no es sólo de estos grupos de mujeres: organismos internacionales como las Naciones Unidas han reconocido que los Estados incurren en una violación a los derechos humanos de las mujeres cuando no toman medidas preventivas para que éstas dejen de morir por causas relacionadas con el embarazo.
En reiteradas ocasiones se ha mencionado que la muerte materna es el mejor indicador del nivel de desarrollo de un país porque refleja la inequidad, desigualdad y pobreza.
Ejemplo de ello son las mujeres rurales, quienes presentan más riesgo de muerte materna debido a las condiciones en las que viven, riesgo siete veces mayor incluso que aquellas que no cuentan con seguridad social, ocho veces mayor que las mujeres analfabetas y tres veces más alto en los municipios de muy alta marginación, documenta el texto La Mortalidad Materna en México: cuatro visiones críticas.
El derecho a disfrutar la sexualidad, a decidir el número de hijas o hijos y el espaciamiento entre éstos, al uso de anticonceptivos y a una maternidad sin riesgos constituyen parte de los derechos humanos.En este sentido, México ha signado varios compromisos internacionales en materia que garantizan a las mujeres que gozarán de una maternidad sin riesgos.
Entre estos se encuentran la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación de la Mujer (Cedaw), que establece que los Estados deben garantizar a las mujeres servicios apropiados con relación al embarazo, parto y puerperio.
La Convención de los Derechos del Niño en su artículo 24 establece que los Estados deben asegurar atención sanitaria prenatal y posnatal apropiada para las madres y desarrollar atención sanitaria preventiva, incluyendo orientación a madres y padres, educación y servicios de planificación familiar.
La Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, la Declaración del Milenio, son entre otros, compromisos que México ha ratificado y en los cuales se le obliga a garantizar el derecho a la salud de las mujeres embarazadas.
Y la Norma Oficial Mexicana-007-SSA2-1993, que establece los criterios de atención a las mujeres embarazadas durante el embarazo, parto y puerperio.
- Artículo Integro:
http://www.milenio.com/mexico/milenio/nota.asp?id=582766&sec=19
Por Lourdes Godínez Leal
Fuente: Milenio.com