Viven más de 60 mil mujeres con VIH SIDA en Haití
La mayoría de las personas que viven con VIH-Sida en Haití, son pobres, y después del terremoto de enero pasado, enfrentan condiciones terribles que las hacen más vulnerables porque todavía no hay atención de ayuda humanitaria dirigida especialmente para quien vive con ese padecimiento, afirmó la doctora, Marie Merci Sevallos, coordinadora de la organización "Cero VIH/SIDA en Haití".
La especialista dijo que a pesar de que no existe una amenaza para el avance significativo del virus del VIH-SIDA en Haití después del desastre natural, la organización que coordina atiende directamente a 600 mujeres y algunos hombres.
Dijo que su organización lleva una década de trabajo más con mujeres que con hombres porque “ellas son las que se reconocen enfermas y acuden en busca de ayuda,” y ellas precisamente necesitan de mucho apoyo porque son quienes atienden a la gente enferma.
La gran mayoría de las mujeres que atiende Cero VIH-SIDA, se fueron a vivir a las provincias porque quedaron sin vivienda. “Ahí no pueden conseguir la medicina retroviral, pero se las conseguimos aquí y la llevamos donde estén. Para que permanezcan dónde están, pues en la ciudad podrían estar peor” aclara.
Fuentes oficiales del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH Sida (ONUSIDA) estiman que en ese país hay 120 mil personas que viven con el virus y que más de la mitad son mujeres.
Según un reportaje de IPS (Amy Bracen, 2006) el los últimos años se ha estabilizado la prevalencia del virus, a manera que en el 2006 se habían reportado menos de la mitad de casos que el en 2003 y en ese año se sabía que unos 10 mil portadores recibían terapia antirretroviral.
En un informe reciente de ONUSIDA, se ubica la prevalencia seropositiva de la población adulta haitiana en 2.2 por ciento, frente al 3.1 por ciento de 2003, pero sin que observara una reducción entre mujeres rurales.
CERO VIH/SIDA EN HAITI
Dicha organización acompaña a las personas que viven con el virus, les ayuda a buscar comida y tener una mínima vida digna. “El mejor apoyo es el acompañamiento, la gente dice que está contenta de haber sobrevivido al terremoto y cuándo ves cómo viven, te das cuenta de que si de por sí, la vida era dura, ahora con la pobreza y el virus, la vida es peor”.
Fuera de la ciudad no consiguen sus medicamentos. ¨Por eso nosotras se los levamos y les llevamos la ayuda humanitaria que conseguimos.¨ Han recibido apoyos de la Red de Salud de Mujeres de América Latina y El Caribe a la que pertenece la organización, de la Redde de Salud de Brasil, de Mano a Mano con las Mujeres de Haití en Puerto Rico y del Campamento Feminista Internacional, entre otras.
La especialista dijo que a pesar de que no existe una amenaza para el avance significativo del virus del VIH-SIDA en Haití después del desastre natural, la organización que coordina atiende directamente a 600 mujeres y algunos hombres.
Dijo que su organización lleva una década de trabajo más con mujeres que con hombres porque “ellas son las que se reconocen enfermas y acuden en busca de ayuda,” y ellas precisamente necesitan de mucho apoyo porque son quienes atienden a la gente enferma.
La gran mayoría de las mujeres que atiende Cero VIH-SIDA, se fueron a vivir a las provincias porque quedaron sin vivienda. “Ahí no pueden conseguir la medicina retroviral, pero se las conseguimos aquí y la llevamos donde estén. Para que permanezcan dónde están, pues en la ciudad podrían estar peor” aclara.
Fuentes oficiales del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH Sida (ONUSIDA) estiman que en ese país hay 120 mil personas que viven con el virus y que más de la mitad son mujeres.
Según un reportaje de IPS (Amy Bracen, 2006) el los últimos años se ha estabilizado la prevalencia del virus, a manera que en el 2006 se habían reportado menos de la mitad de casos que el en 2003 y en ese año se sabía que unos 10 mil portadores recibían terapia antirretroviral.
En un informe reciente de ONUSIDA, se ubica la prevalencia seropositiva de la población adulta haitiana en 2.2 por ciento, frente al 3.1 por ciento de 2003, pero sin que observara una reducción entre mujeres rurales.
CERO VIH/SIDA EN HAITI
Dicha organización acompaña a las personas que viven con el virus, les ayuda a buscar comida y tener una mínima vida digna. “El mejor apoyo es el acompañamiento, la gente dice que está contenta de haber sobrevivido al terremoto y cuándo ves cómo viven, te das cuenta de que si de por sí, la vida era dura, ahora con la pobreza y el virus, la vida es peor”.
Fuera de la ciudad no consiguen sus medicamentos. ¨Por eso nosotras se los levamos y les llevamos la ayuda humanitaria que conseguimos.¨ Han recibido apoyos de la Red de Salud de Mujeres de América Latina y El Caribe a la que pertenece la organización, de la Redde de Salud de Brasil, de Mano a Mano con las Mujeres de Haití en Puerto Rico y del Campamento Feminista Internacional, entre otras.
Por María Suárez Toro
Fuente: Cimac Noticias