23 de Septiembre, Día Internacional contra la Trata y la Explotación Sexual de Mujeres y Niñas.
Conocí a Ángela hace unos cuatro años y me contó con lágrimas su historia. Aún hoy sigue teniendo miedo de que el miserable de origen italiano la localice puesto que la amenazó con matarla a ella y a toda su familia en Rumania.
Pese al miedo que todavía siente, Ángela ha tenido suerte y ha podido escapar de sus explotadores y rehacer su vida.
Para conmemorar esta fecha se han celebrado en Alicante los días 23 y 24 de septiembre las Jornadas Internacionales sobre Explotación sexual de Mujeres y la Trata, con el título "La prostitución: la violencia sexual normalizada".
Para ello, las organizaciones convocantes (la Comisión para la Investigación de Malos Tratos a Mujeres, la Plataforma de Organizaciones de Mujeres por la Abolición de la Prostitución, la Coalición Internacional contra el Tráfico de Mujeres, la Asociación Alicantina de apoyo a las Mujeres en Situación de Prostitución AMUNOD), han concluido, entre otros aspectos, con la reclamación de un compromiso firme de las instituciones para considerar a la prostitución como una forma extrema de violencia sexual contra las mujeres y actuar en consecuencia. Asímismo, se ha reclamado la inclusión de la prostitución en la Ley Integral contra la violencia de género.
Hemos de recordar que en el Estado Español está vigente desde hace tres años el Plan Integral de Lucha Contra la Trata (que puede consultarse en www.migualdad.es) cuya vigencia está cercana a finalizar y cuyas conclusiones después del primer año de aplicación, aún siendo bastante tibias, arrojan unas perspectivas, sobre todo de cara a la sensibilización de la opinión pública y del tratamiento de este fenómeno por parte de los medios de comunicación, que dan a entender que, al menos, el debate está servido.
No podemos perder de vista que la defensa de los derechos humanos es incompatible con la trata de personas y que al mismo tiempo alimenta el mercado de la prostitución de mujeres, niñas y niños en todo el mundo y, por tanto estos dos fenómenos están íntimamente ligados. Como consecuencia habrán de ser afrontados por parte de gobernantes y legisladores conjunta y transversalmente para conseguir su erradicación.
Pero tampoco podemos olvidar que la trata de personas con fines de explotación sexual es un fenómeno transnacional y que por ello se hace mucho más difícil la persecución de este tipo de crimen organizado.
Iniciativas como las que se han vivido en Alicante en la que este tipo de terrorismo organizado ha sido tratado de forma multidisciplinar favorece, de forma explícita, que la ciudadanía se posicione en contra del mismo y exijamos a quienes nos gobierna en todos los ámbitos, medidas mucho más contundentes para perseguir a los criminales y de protección y ayuda a las víctimas, que siguen siendo la parte más vulnerable de este tipo de crimen organizado a nivel mundial.
Ante este tipo de terrorismo no nos podemos quedar en silencio y ha de ser denunciado y perseguido y debemos exigir que se destinen los recursos públicos y privados necesarios para ello puesto que el presente y el futuro de centenares de miles de mujeres, niñas y niños están en juego.
No podemos permitir que este nuevo tipo de esclavitud conviva y perviva y por ello hemos de ser beligerantes en la exigencia de su desmantelamiento inmediato.