Un Cómic recrea la vida de Olympe de Gouges, la primera feminista de la historia
Olympe de Gouges una mujer adelantada para su época
Hay quien dice que fue la primera feminista de la historia. Probablemente sea así, ya que de su pluma nació la «Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana», en 1791. Algo extraordinario en aquellos tiempos: se atrevió a sugerir que ellas eran iguales ante la ley que ellos. En esto y otras muchas cuestiones fue una adelantada a su época, lo que le valió pasar por la guillotina en medio de la locura revolucionaria.
La nueva novela gráfica de Catel Muller y Jose-Louis Bocquet, «Olympe de Gouges» (Sins Entido, 488 páginas, 30 euros) nos ofrece un detallado recorrido por la vida de esta autora teatral y ensayista que no solo se limitó a clamar por la igualdad, sino que llevó a la práctica su pensamiento. Así, cuando se quedó viuda a los 18 años, se negó a portar el apellido de su difunto marido. Incluso se cambió el suyo propio, Marie Gouze, y adoptó el de Olympe.
Influida por Rousseau y autodidacta, se dedicó a llevar una vida considerada libertina, negándose a ser propiedad de ningún miembro del género masculino, pero sin por ello tener que abjurar, ni mucho menos, de sus placeres. Participó en laRevolución Francesa en el bando de los girondinos, lo que finalmente le llevó al cadalso en noviembre de 1793, bajo el dedo acusador deRobespierre.
Además, defendió la abolición de la esclavitud, el amor libre, se mostró contraria a la pena de muerte... Todo ello aparece en este libro cuyos autores son los mismos que los de ese otro gran cómic titulado «Kiki de Montparnasse»(2010). Está clara, pues, la atracción por mujeres valientes que desearon ser dueñas de sus destinos, sus cuerpos y sus mentes.
Catel Muller (Estrasburgo, 1964) es también ilustradora de obras infantiles, y en 2004 obtuvo el Premio del público en el Festival del cómic de Angulema, junto a Christian de Metter, con«Le Sang des valentines». Por su parte, Jose- Louis Bocquet (Neuilly- Sur Seine, 1962) es periodista, crítico literario, autor y guionista de cómic.
Quizás se note ese toque infantil en el dibujo de Catel, que podría encajar perfectamente en un cuento para niños. Pero junto a esta característica, una atmósfera de sensualidad envuelve todo el libro, y hay un exhaustivo trabajo de documentación y de recreación del siglo XVIII francés y el París de la época en un sinfín de detalles (vestuario, peinados, calles, retratos...).
En sus últimas páginas se incluye la biografía de varios de los personajes históricos que aparecen en las viñetas, como Jean-Jaques Rousseau, Bernardin de Saint-Pierre, Voltaire, Luis XVI, María Antonieta, La Fayette, Danton... No está mal para hacer un repaso a unas fechas que marcaron un antes y un después en el devenir de la raza humana.
Fuente: ABC