¿Qué hay algo que ha fallado? Susana G.,asesinada en Málaga, no recibió la asistencia telemática que solicitó.
Antes de ayer, 15-2-2011, Susana G., una mujer de 37 años, murió asesinada a hachazos por su expareja, J.R.C., sobre quien pesaba una condena por maltrato y la correspondiente medida de alejamiento. Susana G. había solicitado teleasistencia, que no se le facilitó por una deficiencia en la solicitud, y las fuerzas de seguridad habían calificado la situación como de *riesgo bajo*.
Desde luego los hechos son graves: lo es que se infravalore el riesgo (ciertamente es una probabilidad que cambia con las circunstancias, lo que obliga a revisar las valoraciones), lo es que esta mujer no tuviera teleasistencia por haber existido un error o deficiencia formal en la solicitud: primero se le proporciona la asistencia telemática y sobre la marcha o después se subsanará el error o deficiencia, así habría de hacerse; pero tan grave como eso me parece que se considere que "*en este caso... hay algo que ha fallado*" porque había formulado denuncia y tenía orden de alejamiento, y que no se considere que *muchas más cosas están fallando* en el sistema *cuando las otras diez mujeres asesinadas este año ni siquiera habían formulado denuncia.* La sociedad infravalora el riesgo en que viven miles y miles de mujeres cada día y descree las denuncias de quienes sí la llegan a formular.
¿Estaban en condiciones de denunciar, en estos tiempos en que las mujeres que denuncian son tachadas en general de falsarias e interesadas? Aún más falsarias e interesadas se las considera si habían tratado de evitar la denuncia, con todo lo que conlleva, y los malos tratos salen a relucir en el procedimiento civil de separación o divorcio. Pero ay de ellas si saben o temen y de algún modo intentan proteger a sus hijos e hijas del maltrato del padre, o si simplemente no tienen fuerza moral para forzarles a visitarle cuando los menores no quieren hacerlo: se las acusa de manipularles y alienar al otro progenitor y el sistema, si no lo hacen ellas, invocando el interés superior de los menores, fuerza los contactos con el padre, procesa a las madres por desobedientes, incluso da la custodia a ese padre y hasta llega a prohibir las visitas entre madre e hijos para “curar” a éstos de un supuesto síndrome de alienación parental.
Leyendo un capítulo de un libro, publicado en 2009, llamado "La protección del menor en las rupturas de pareja" (capítulo IV, “Interferencias parentales: el síndrome de alienación parental”, escrito por el juez decano de Almería, Luis Miguel Columna) encuentro lo siguiente -me permito reproducir sus palabras porque son sumamente ilustrativas de lo que impide a las mujeres denunciar y de la infravaloración, o directa negación, del riesgo, a que me refiero-:
"… *primera idea de mi exposición, consistente en que en todo procedimiento civil de separación, o en todo procedimiento penal de separación, y aquí me refiero a los casos en que se utiliza la vía del Juzgado de Violencia de Género por un miembro de la pareja para separarse, muy conscientemente y muy bien asesorados, en un gran número de casos, lo primero que se viene a hacer al Juzgado es a engañar al Juez. Esto se hace con dos motivos fundamentales, obtener el mayor beneficio económico posible y fastidiar lo más que se pueda a la persona que antes tanto se quería.”…*
*“Los especialistas que han participado en este Congreso creo que estarán de acuerdo conmigo al afirmar que pocos son los casos de separaciones con problemas si no hayhijos de por medio y se les quiere utilizar a estos para obtener un mayor beneficio económico en la separación”…*
* “… cuando se quiere que un hijo intervenga en un procedimiento de separación o de divorcio…, si se lleva a los hijos a declarar, porque así los haya propuesto uno de los cónyuges, la experiencia me dice que al menor se le hace con mucha frecuencia un pequeño lavado de cerebro para que declare en contra de su padre o madre. La experiencia también me dice que habitualmente son las madres las que lo hacen en contra de su cónyuge… …a pesar de que con independencia de los problemas y causas de la separación, el padre ha ejercido siempre como tal y tiene un trato maravilloso con el hijo.” *(Las citas son textuales).
* “… me han llegado noticias, de las que no tengo pruebas , de la existencia de <> que enseñaban a una mujer que ha denunciado unos malos tratos cómo tiene que declarar ante el Juez, en especial en el momento en el que tienen queempezar a llorar,…”…*
*“Sobre el SAP existen antecedentes en los que la justicia ha actuado penalmente contra dicho maltrato, que generalmente es causado por madres separadas movidas por el despecho o venganza hacia el otro progenitor.”… *
*“Es muy importante que desde el punto de vista médico o psicológico se acepte esta realidad, pues si queremos avanzar en la erradicación de este problema, es necesario, si utilizamos el ámbito judicial, de la realización de las correspondientes pruebas periciales por estos especialistas.”…*
*“Centrándome en la repercusión que han tenido estas situaciones en el ámbito judicial, debemos distinguir entre pleitos planteados en el ámbito civil, donde en separaciones y divorcios se alega cada vez con más frecuencia este problema, con la correspondiente eficacia que llevará consigo siempre que se pruebe, y su incidencia en la jurisdicción penal, donde son aún muy pocas las resoluciones que se han producido.”*
*“… sigo afirmando, que cuando una mujer quiere separarse de su marido, y no haybuen entendimiento entre la pareja, y por la razón que sea se ha pasado del amor al odio, se utiliza la vía penal de separación, no sólo por la rapidez con la que se va a resolver el procedimiento, sino por las grandes ventajas que puede obtener, lo que no se lograría por la tradicional vía civil. Muchas de estas denuncias, me consta que son falsas, y que buscan solamente lograr estas ventajas. Porque me permito recordar quecon la Legislación vigente en nuestro país… que desgraciadamente nos lleva a los Jueces de lo Penal a condenar a inocentes. Pero avanzo un poco más, la utilización de la vía penal, cuando se dicta sentencia de condena por malos tratos, lleva además… la correspondiente prohibición de acercarse o comunicarse con el cónyuge afectado,…. Lo que permite a la supuesta maltratada, conseguir que el supuesto maltratador, no pueda ver a sus hijos
durante todo el tiempo de la condena, lo que le permitirá, si ese es su deseo disfrutar de un tiempo maravilloso, para terminar de lavarles el cerebro a los pequeños en contra de su padre…”*
Pues bien, las mismas ideas que circulan por la mente de este juez son las que circulan por el imaginario colectivo y se imponen como ciertas, empoderan al violento e impiden formular denuncia, que sería en muchas ocasiones el único medio para salir de esa situación, a las mujeres víctimas de violencia, ya que, como bien les dice su maltratador, están locas si piensan que alguien va a creerlas.
El Congreso que cita se realizó en el marco de un Proyecto de Investigación de la Universidad de Granada, fue financiado por la Junta de Andalucía con dinero público, y dio origen al libro referido, publicado por Thomson Reuters-Aranzadi y el Centro de Iniciativas de Cooperación al Desarrollo de la Universidad de Granada (CICODE). **Dichos Proyecto de Investigación y libro, fueron dirigidos por la profesora del Departamento de Derecho Civil de la Universidad de Granada Dª. Mª. del Carmen García Garnica, quien
termina su introducción expresando su reconocimiento y agradecimiento a la Asociación Española Multidisciplinar de Investigación sobre Interferencias Parentales, “*Asociación joven y llena de vitalidad, cuya labor se centra en la materia que nos ocupa…”.*
La misma* *profesora es autora de un artículo llamado “*El Síndrome de Alienación Parental a la luz del interés superior del menor” *publicado en la revista “Derecho Privado y Constitución”, en el que, bien que de forma bienintencionada, y no tan burda, y haciendo referencia a las críticas al SAP, sigue defendiendo la existencia y aplicación del mismo -lo cual resulta aún más peligroso, pues presenta el supuesto síndrome como una teoría legítima y creíble, cuando no es más que pseudociencia-: trae a colación estadísticas sobre número de separaciones y divorcios contenciosos de matrimonios con hijos, pero ninguna estadística sobre violencia de género ni cuántas separaciones o divorcios pueden traer causa de la misma; alega que el SAP sólo se podrá apreciar cuando el rechazo de los hijos hacia el padre, o la madre, sea injustificado pero olvida que la doctrina del SAP valora cualquier posible alegación que justifique el rechazo como síntoma de SAP e interpreta cualquier síntoma de maltrato en el menor como síntoma de SAP; habla de la interminable judicialización de los conflictos tras la ruptura en familias con hijos pero no se plantea el maltrato como una de sus posibles causas, precisamente la más frecuente; habla de su falta de base científica manifestando que no está incluido en el DSM IV ni en el CIE 10 pero no que tal inclusión ha sido expresamente denegada por
haberse considerado un constructo falsario y dañino, ni que Gardner se tuvo que autopublicar todos sus escritos porque no le era posible hacerlo en ninguna publicación científica; habla de las críticas al SAP por su
utilización fraudulenta y como instrumento sexista, pero olvida hacer referencia a las tres condenas penales al propio Gardner por abusar sexualmente de sus hijas, a que diseñó su teoría trabajando como perito para padres acusados de abusar sexualmente de sus hijos, al hecho de que en sus escritos defendía abiertamente la pedofilia ….
Esta misma profesora va a impartir una clase sobre “Interferencias parentales: el síndrome de alienación parental” en un Curso organizado por la Fundación de Estudios y Prácticas Jurídicas de Granada, para abogados, profesionales interesados en la materia y alumnos de las licenciaturas y grado en Derecho, que se llevará a cabo en los meses de marzo y abril de este año (2011).
¿Permitirán estas mimbres que más mujeres obtengan mejor protección y salgan de la situación de maltrato en que viven? ¿o que disminuya el número de mujeres asesinadas? ¿Quizás que las víctimas reciban una mejor atención profesional? Evidentemente, no.
¿Qué maltrato? nos dicen. Si ya somos todos iguales, es mentira que haya tanto maltrato a mujeres, se están denunciando tonterías, y se está condenando a inocentes. Para quienes sostienen estas ideologías la violencia de género es una falacia y las leyes contra la violencia de género son sexistas, atacan a "los hombres". ¿Creen, quienes así se expresan, que sólo eran maltratadas las mujeres que resultan asesinadas? Ni siquiera ellas, porque según muchos de los defensores de estas doctrinas el que mata a “su mujer” lo hace porque estaba muy cabreado por la o las denuncias falsas de ella o, si no había denuncia, porque se siente perseguido por estas leyes “sexistas” que “criminalizan a los hombres” y "dan a las mujeres todas lasventajas”, a lo peor es que ella le había dicho que le iba a denunciar, o se iba a divorciar de él, y él iba a tener que pasar una pensión alimenticia para sus hijos e irse de la vivienda familiar.
Por María del Mar Daza Bonachela.
Lda. en Derecho, Experta universitaria en Criminología y en Violencia de Género, especialista en Victimología.
La Ciudad de las Diosas
