Niñas violedas sin opción a abortar
El caso de una niña chilena que fue madre a los 13 años tras ser violada por su padre se suma al de Belén, que tiene 11 y está embarazada de su padrastro, que abusó de ella repetidamente y fue detenido el pasado viernes. Los casos de estas niñas han reabierto en Chile el debate sobre el aborto, ya que está prohibido en cualquier forma, incluso si peligra la vida de la madre por una norma impuesta por el dictador Augusto Pinochet en 1989.
María y su madre han decidido informar de la situación que vivieron en 2012 al conocer el caso de Belén. María fue violada por su padre desde los siete años y en octubre de 2012, cuando tenía trece, dio a luz un bebé fruto de esos abusos. Ambas denunciaron al violador, que espera juicio por violación reiterada. Según informó la red pública TVN.
Según la Fiscalía de la región de Los Lagos, Belén, encinta de 14 semanas, vive con su abuela, quien tiene su custodia legal, y visitaba los fines de semana a su madre, donde al menos en tres ocasiones en el último año fue violada por el hombre que convive con su progenitora.
"El hombre la forzaba bajo amenaza, por lo que Belén, en primera instancia, culpó de su embarazo a un compañero de colegio, pero cuando van los papás del niño a conversar con la abuela, ella confiesa que el culpable era su padrastro", dijo al diario La Tercera el fiscal Jaime Aguayo. Desde el viernes pasado, el hombre está en prisión preventiva.
Al igual que en El Salvador, Honduras, República Dominicana, Surinam y Nicaragua, en Chile la interrupción voluntaria del embarazo está absolutamente prohibida por una norma impuesta por el dictador Augusto Pinochet en 1989, poco antes de entregar el poder, al modificar el artículo 119 del Código Sanitario, que desde 1931 permitía en Chile el aborto terapéutico.
Los casos de Belén y de María han llegado justo en plena campaña electoral; algo que, además de avivar el debate, puede obligar a ambos candidatos a pronunciarse sobre una posible despenalización. Michelle Bachelet, a través de su cuenta de Twitter ha planteado que el aborto terapéutico y en caso de violación "deben despenalizarse" y también el candidato presidencial del Partido Progresista, Marco Enríquez Ominami, se ha mostrado partidario de la despenalización, y llamó a sus contrincantes a pronunciarse sobre el asunto.
Las organizaciones de mujeres y de derechos civiles han emprendido una campaña en las redes sociales para pedir la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Organizaciones como Corporación Humanas, Observatorio Género y Miles Chile instaron a reabrir el debate.
Es lamentable: Belén y María no son las únicas. Hay muchas niñas en todo el mundo violentadas y, además, obligadas a ser madres.
María y su madre han decidido informar de la situación que vivieron en 2012 al conocer el caso de Belén. María fue violada por su padre desde los siete años y en octubre de 2012, cuando tenía trece, dio a luz un bebé fruto de esos abusos. Ambas denunciaron al violador, que espera juicio por violación reiterada. Según informó la red pública TVN.
Según la Fiscalía de la región de Los Lagos, Belén, encinta de 14 semanas, vive con su abuela, quien tiene su custodia legal, y visitaba los fines de semana a su madre, donde al menos en tres ocasiones en el último año fue violada por el hombre que convive con su progenitora.
"El hombre la forzaba bajo amenaza, por lo que Belén, en primera instancia, culpó de su embarazo a un compañero de colegio, pero cuando van los papás del niño a conversar con la abuela, ella confiesa que el culpable era su padrastro", dijo al diario La Tercera el fiscal Jaime Aguayo. Desde el viernes pasado, el hombre está en prisión preventiva.
Al igual que en El Salvador, Honduras, República Dominicana, Surinam y Nicaragua, en Chile la interrupción voluntaria del embarazo está absolutamente prohibida por una norma impuesta por el dictador Augusto Pinochet en 1989, poco antes de entregar el poder, al modificar el artículo 119 del Código Sanitario, que desde 1931 permitía en Chile el aborto terapéutico.
Los casos de Belén y de María han llegado justo en plena campaña electoral; algo que, además de avivar el debate, puede obligar a ambos candidatos a pronunciarse sobre una posible despenalización. Michelle Bachelet, a través de su cuenta de Twitter ha planteado que el aborto terapéutico y en caso de violación "deben despenalizarse" y también el candidato presidencial del Partido Progresista, Marco Enríquez Ominami, se ha mostrado partidario de la despenalización, y llamó a sus contrincantes a pronunciarse sobre el asunto.
Las organizaciones de mujeres y de derechos civiles han emprendido una campaña en las redes sociales para pedir la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Organizaciones como Corporación Humanas, Observatorio Género y Miles Chile instaron a reabrir el debate.
Es lamentable: Belén y María no son las únicas. Hay muchas niñas en todo el mundo violentadas y, además, obligadas a ser madres.
Fuente: AmecoPress.