septiembre 09, 2017

Los graffitis de Mujeres Creando


A lo largo de la historia contemporánea los graffitis han sido un medio de comunicación de la inconformidad social para visibilizar exigencias que sólo las paredes pueden tolerar, y que contrastan con el cotidiano de los y las transeúntes de una ciudad. En el caso de los graffitis de Mujeres Creando, se trata de un mecanismo de expresión que despojada la censura de los medios de comunicación tradicionales, para dar a conocer al imaginario colectivo un locus de enunciación feminista; la letra y firma de éstas mujeres boconas e imprescindibles son imposibles de no reconocer, y se tratan de un trabajo de calle que vienen realizando hace más de veinte años, han graffiteado muros de La Paz, Santa Cruz, Cochabamba y Sucre.

Si juntásemos todos los graffitis -que a estas alturas ya son decenas y decenas- de la autoría de Mujeres Creando, estaríamos en frente de una tesis feminista que no se agota y que ha sido, en varias ocasiones, el punto de partida para repensar, discutir y debatir en grande, varios aspectos de la política, la cultura, el sistema de salud, el sistema militar, de justicia y ahora mismo, con los graffitis dedicados a la investidura de la ex modelo, ex reina del carnaval cruceño, y actual esposa del Alcalde de La Paz (Luis Revilla), Maricruz Ribera.


En esta oportunidad Mujeres Creando sale a cuestionar la impostura sobre las identidadessocialmente establecidas alrededor del “ser mujer”, y no cualquier mujer obviamente, sino esa mujer que ha entrado al campo de la política y del trabajo social validada por ser ‘la esposa de…’, esa mujer que se ha lanzado a trabajar en contra de la violencia machista y que ha organizado una serie de actividades, aglomerando una gran cantidad de mujeres encabezadas por Maricruz por supuesto, y que creen que la violencia ejercida contra ellas mismas puede erradicarse simplemente con programas de autoayuda, adornadas de globos y poleras color rosa y trotando maratones con el rótulo de “Yo… soy mi primer amor”; iniciativa que hace dos años lidera la ‘primera dama’ de la ciudad de La Paz.

¿Pero dónde se genera la tal polémica, más bien construida por los medios de comunicación que en una sociedad machista como la boliviana, no se podría esperar otra cosa? De tantos graffitis, uno más valioso que el otro, se han quedado con los referidos a Maricruz Ribera y a lo que ella representa. Es de antemano sabido, que los análisis sobre esos escritos no saldrán más allá de una visión machista que intenta mitigar la creatividad de las Mujeres Creando, tan provocadora y tenaz, con respuestas agresivas, violentas e intentando ridiculizar a una de las mujeres feministas que más ha entregado pensamiento crítico a la sociedad boliviana como Maria Galindo, primera lesbiana pública en Bolivia -aunque las organizaciones LGBTs lo quieran desconocer-, autora de la tesis de la despatriarcalización -no así el gobierno de Evo Morales-, locutora de radio y escritora; se declara loca, agitadora callejera y buena cocinera.


La primera lectura simplista sobre los graffitis de Mujeres Creando, pone en escena una de las visiones más misóginas de la historia, construida y hermetizada por los hombres: Mujer versus mujer. Las preguntas escandalizadas sobre esta lectura son “¿cómo va pelear Maria Galindo con la Maricruz, siendo mujeres ambas? ¿De qué ayuda a la lucha contra la violencia si entre mujeres se pelean? ¿Por qué atacan a la (tan ejemplar) Maricruz Ribera, que tan lindas actividades organiza, y tan bonita y rubia que es? ¿No son acaso las Mujeres creando un montón de resentidas, lesbianas, machorras, gordas, no serán esos los motivos para tan grave ensañamiento contra la Maricruz?”


Existe una visión generalizada, reforzada por una educación y un sistema machista y conservador que se escandaliza cuando una mujer “ataca” a otra, porque claro, lo correcto es supuestamente, ser educada, obediente, sumisa, hablar despacio, comportase como una buena mujer, etc. (mecanismos de control muy utilizados en la Edad Media), a esto se le suma el ideario colectivo de que una mujer es igual a otra, sólo por el hecho de serlo, sólo por tener vagina, y por lo tanto la representación biológica de un mujer sobre otra suple directamente a un sujeto político que está lejos del entendimiento social que ve en Maricruz Ribera a una digna representante de las mujeres, esposa ideal, trabajadora y luchadora por “los derechos de la mujer”, así en singular “la mujer”, porque la visión patriarcal sólo reconoce un modelo de ser mujer, el que la esposa del Alcalde representa. En efecto lo que Maria Galindo y las Mujeres Creando transmiten a la masa defensora de la “sufrida y maltratada” Maricruz, es desobediencia, rebelión, desacato, rompimiento de las buenas costumbres y valores morales.


Sin embargo, todo eso ha sido el motor para que Mujeres Creando, desde su trinchera feminista y anarquista, sea un referente de lucha en Bolivia y en la región latinoamericana, siendo el único colectivo de mujeres capaz de cuestionar el proyecto de izquierda del Estado Plurinacional que nuevamente pone a las mujeres para disfrazar políticas machistas, leyes vacías, iniciativas gubernamentales y municipales de carácter colonial; han sido capaces de destapar casos de feminicidios y demostrarnos cómo la Fiscalía y el sistema judicial se hacen cómplices de los feminicidas, etc. las Mujeres Creando, imposibles de ser cooptadas por cualquier partido político, cuestionan el sistema mismo del cual heredamos los resabios más violentos que se ensañan contra las mujeres, los maricones, las prostitutas, las lesbianas, y los sectores más populares.


Han establecido dos casas en Bolivia, una en La Paz (La Virgen de los Deseos) y otra en Santa Cruz (Los Deseos de la Virgen). En la primera funciona la Radio Deseo, un medio de comunicación pensado de una forma no lucrativa, sino más bien de carácter expresivo, informativo que además está abierto a toda clase de propuesta radial, y la publicidad no es aceptada si ésta viene de la Coca-Cola o bancos usureros. También funciona una guardería, habitaciones de hospedaje, consultoría psicológica, un comidero, una escuela de autodefensa y hasta baño público, que generan los ingresos necesarios para la subsistencia del movimiento. Pero quizás lo más valioso -esto en ambas casas-, es la oficina de Mujeres en busca de justicia, que hace seguimiento a casos de violencia machista de forma gratuita, inmediata y eficiente.


Esta oficina siempre está llena de mujeres que han desviado su camino hacia las oficinas estatales que dicen luchar contra la violencia y que reciben gordos presupuestos para ello, por ser asfixiantes, ineficientes, tardías, porque las mujeres se cansan de esperar a que los funcionarios aprendan los procedimientos actuales, porque los policías las reciben de mala manera y les toman los testimonio en un lugar indiscreto mientras realizan cualquier otra actividad, porque los hospitales públicos se niegan a realizar un aborto a las jóvenes que han quedado embarazadas producto de una violación, por eso y por varias otras razones, la oficina de Mujeres Creando es la que muchas mujeres prefieren.


Los graffitis no son otra cosa más que producto de un proceso de lucha de las Mujeres Creando que constantemente han venido provocando en la sociedad boliviana reacciones de todo tipo, y que algunas buscan implantar la confusión y el desprestigio sobre el feminismo ejercido por estas mujeres, que como dije al principio, no se agota ni se detiene.
Christian Daniel Eguez, es integrante de “Marica y Marginal”


Fuente: http://www.periodistavirtual.com

Sí a la Diversidad Familiar!
The Blood of Fish, Published in