Diputados de Chile votan en contra de las mujeres y dejan la paridad fuera del proceso constituyente
Imagen: Agencia Uno
Una vez más la pseudodemocracia chilena hace notar su violencia patriarcal, este miércoles 18 de diciembre, excluyendo la posibilidad de incluir la paridad de género en el proceso constituyente, que se está desarrollando producto del estallido social, desde el pasado 18 de octubre. Lo que significa una situación contradictoria, porque el estallido ha servido para visibilizar las constantes desigualdades y ha puesto en jaque, a la actual administración gubernamental, para generar los cambios estructurales que permitan establecer un Estado de “derechos”, siguiendo el principio de igualdad y no discriminación.
Es así, que surge la necesidad imperante de elaborar una nueva Carta fundamental, que es la propuesta hecha para la vuelta de la paz y el orden social del país, en los llamados Acuerdos de Paz el 15 de noviembre. Debido a que a la fecha, aún rige la Constitución de los años ochenta implantada por la dictadura de Pinochet y que se caracterizó, por los lineamientos políticos ideológicos de las libertades propios de un modelo neoliberal y que es conocida, como la doctrina del shock. En vez de asegurar los derechos fundamentales, que se encuentran concentrados solamente en el artículo nº19, y que durante todos estos años se convirtieron en una transacción privada sobre la salud, la educación, la prestación social, etc.
En este panorama, recién el 16 de diciembre, la Comisión Constituyente de la Cámara de Diputados, con una votación “por siete votos a favor, uno en contra y dos abstenciones”, había demostrado la voluntad de habilitar la representación paritaria de género y la ejecución electoral teniendo en cuenta el criterio del sistema de las parlamentarias establecido en la Ley nº 20.840 de 27 de abril de 2015, que “Sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional”. Como una forma de reconocer la inclusión de las mujeres dentro de las demandas sociales imperantes sobre la toma de decisiones. Y en que se destaca, la carta presentada por las Diputadas del oficialismo y oposición (el mismo 16 de diciembre), tras la incidencia del trabajo de diversas agrupaciones del movimiento feminista y cuya propuesta señalaba que “las listas presentadas por un partido político no podrán superar el 50% de candidaturas del mismo sexo y deberán estar encabezadas en las cédulas por mujeres, siendo luego alternadas por hombres”.
Imagen: Onumujeres Chile
Sin embargo, una vez más la historia se repite respecto a la inclusión política de las mujeres y en la Cámara se aprobó la propuesta general del proceso constituyente para abril del próximo año, con 127 votos a favor y 18 en contra, y se dejó fuera la indicación de la representación paritaria, que sólo alcanzó una votación a favor de 80 Diputados(as), más 62 en contra y siete abstenciones. Hecho que debilita la democracia y la representación en igualdad “porque las mujeres no son sólo el 51% de la población”, y se debe garantizar un debido proceso que asegure la paridad de participación, en los asuntos que les conciernen dentro del poder y la toma de decisiones, como “ciudadanas plenas de derecho y de primera categoría”.
Imagen: Whatsapp Asamblea Feminista Plurinacional
Así queda por recordarles señores patriarcales y señoras mal hechas de patriarcado, que “Sin paridad No hay democracia” .
Por Daniela Andrade Zubia
Coordinadora de La Ciudad de las Diosas
Fuente: Tribuna Feminista