A pesar de muchos retos actuales, hay esperanza para las mujeres en el Sudán del Sur
El ritmo del cambio ha sido lento para el Sudán del Sur desde
que se convirtió en la nación más nueva el 9 de julio de 2011. AWID
conversó con Lilian Riziq, Ministra de Agricultura, Silvicultura e
Irrigación en el Condado de Wau, del estado Bahr al-Gazal Occidental, sobre algunos de los retos que las mujeres enfrentan en este país incipiente.
AWID: Ha transcurrido casi un año desde que el Sudán del Sur se
convirtió en una nación independiente.[1] ¿Qué ha cambiado para las
mujeres en el país durante este periodo?
Lilian Riziq (LR): Quiero
creer que el Gobierno ha hecho algo para que haya desarrollo y cambios,
pero ha habido enormes retos – incluyendo la demarcación de la frontera
y conflictos por las reservas de petróleo – que le han impedido cumplir
tanto como quisiera en lo concerniente al desarrollo. Tenemos un
documento llamado Plan de Desarrollo del Sudán del Sur,[2] que es el
plan de desarrollo del país para los próximos tres años.
Ha habido
algunos cambios en cuanto a que las mujeres tengan una voz más fuerte.
Las mujeres constituyen el 25 por ciento de la Comisión Nacional de
Revisión Constitucional, pero por supuesto tuvimos que hacer ruido para
que fueran incluidas.[3] En este momento tenemos un proceso de consulta
para la formación de la Comisión Nacional Electoral y las mujeres están
exigiendo el 25 por ciento de participación, así que hay progresos
respecto a la representación femenina en la toma de decisiones. También
hay más libertad religiosa en el Sudán del Sur y, a diferencia del
Sudán, no existen restricciones en cómo las mujeres pueden vestirse. El
sur es menos conservador y se hace una clara separación entre religión y
Estado.
Sin embargo, existen muchas áreas que necesitan atención,
por ejemplo, en lo concerniente a la seguridad de mujeres y familias
que viven a lo largo de la frontera, donde hay conflicto y están también
las cuestiones de seguridad alimentaria, salud de las mujeres y
mortalidad materna.
Pero las mujeres están uniéndose y muchas
organizaciones de mujeres ya están trabajando para educarlas respecto a
sus derechos en la Constitución y asuntos relacionados con la paz, la
seguridad y el desarrollo. En estos momentos hay un enorme enfoque
internacional en el Sudán del Sur y organizaciones como ONU Mujeres
están ahí para apoyar el empoderamiento de las mujeres, por lo que
numerosas organizaciones de mujeres están aprovechando este apoyo.
AWID:
El asunto de la ciudadanía ha sido fuertemente debatido desde la
secesión. ¿Por qué es esta cuestión tan importante para las mujeres?
LR: La ciudadanía es un tema muy importante porque la gente ha sido desplazada como resultado de la separación de los do
s países. Hay muchos matrimonios mixtos entre
mujeres y hombres sudaneses y sudsudaneses, como también familias
involucradas. La Ley de Nacionalidad del Sudán del Sur permite la doble
ciudadanía, lo cual no ocurre en el Sudán, donde la gente sudsudanesa no
tiene derecho a la nacionalidad sudanesa. Muchas personas perdieron su
ciudadanía del Sudán después de la secesión, pese a que ahí estaban
viviendo, tenían casas, trabajaban, sus hijas e hijos iban a la escuela,
etc. Éste es un asunto crucial, especialmente para las mujeres y, sobre
todo, las que viven a lo largo de la frontera.
En ambos países se
espera que la gente se registre como extranjera si no tiene
nacionalidad, para saber cuántas personas extranjeras están viviendo en
cada uno. Pero en el Sudán del Sur hay flexibilidad con las personas
sudanesas, quienes pueden poseer propiedades, vivir y trabajar en el
país y no se les está pidiendo que se vayan. En el Sudán, sin embargo,
gente sudsudanesa está siendo forzada a dejar el país y cada día
centenares de personas son deportadas y transportadas desde el Sudán.
AWID: Previo a la independencia, una Constitución provisional en
el Sudán del Sur estipuló que las mujeres deben constituir el 25 por
ciento de representantes en los organismos Legislativo y Ejecutivo. ¿Ha
ocurrido esto?
LR: En general no hemos alcanzado el 25 por ciento
en todas las áreas. Hay un 25 por ciento de mujeres en el Parlamento,[4]
pero sólo una de seis asesores del Presidente es mujer y en el Gabinete
únicamente cuatro mujeres (casi 14 por ciento) son titulares de los 29
ministerios clave. Las mujeres conforman sólo el 10 por ciento de las
Comisiones Independientes y son apenas el seis por ciento a cargo de los
Viceministerios. Se espera que ellas promuevan los derechos de las
mujeres y hay muchas organizaciones defensoras de los derechos de las
mujeres que están abogando por éstos. Ahora tenemos mujeres en el
Parlamento, así que necesitamos ver cómo esos grupos pueden trabajar
juntos.
No obstante, el problema continúan siendo las arraigadas
normas culturales y actitudes sociales que discriminan y marginan a las
mujeres. Por ello es tan importante la educación, ya que cuantas más
niñas tengan acceso a ésta, mayores serán las probabilidades de que
veamos un cambio. Pero eso podría no ocurrir en nuestra era porque los
cambios de actitud toman mucho tiempo. Quizás sólo veamos el cambio en
la siguiente generación.
AWID: ¿Ha habido progresos en cuanto a implementar las disposiciones de la Constitución provisional?
LR: No
tantos en un solo año, pero la Constitución provisional contiene muchas
bellas disposiciones – incluyendo el acceso a la educación, los
derechos a participar en la vida pública, el ahora derecho de las viudas
a heredar propiedades, etc. Sin embargo, lo que nos falta es
implementación, porque sólo ha transcurrido un año y el país ha estado
pasando por muchos cambios, tratando de determinar sus retos externos e
internos. Ahora estamos iniciando una revisión de la Constitución
provisional para hacerla permanente y esperamos que esto se concluya a
finales del próximo año.
AWID: En el proceso de hacer permanente
la Constitución, ¿piensa usted que habrá algún cambio en las
disposiciones relativas al género?
LR: Los cambios que podríamos
ver no necesariamente afectarán la Carta de Derechos. A la gente le
preocupan más algunos asuntos como el tipo de gobierno que podamos
tener, el poder del Presidente y el derecho a la alimentación, por
ejemplo. Hay otras cuestiones relacionadas con los derechos de las
mujeres que las mujeres queremos ver en la Constitución final,
incluyendo la edad permitida para contraer matrimonio, porque un
artículo[5] se refiere a la familia pero no estipula esa edad y muchas
adolescentes están casándose, mueren durante el parto, sufren violencia
doméstica, etc. Las mujeres queremos que la edad legal para contraer
matrimonio sean los 18 años. Otros asuntos importantes son el derecho a
la salud y los cuidados de salud porque el Sudán del Sur tiene la tasa
más alta de mortalidad materna a nivel mundial. Las mujeres también
queremos que la cuota del 25 por ciento se incremente a 30 por ciento.
AWID: ¿Se han estado organizando juntas las mujeres del Sudán y el Sudán del Sur antes y después de la secesión?
LR: Cuanto fui la Directora Ejecutiva de la Red de Empoderamiento de la Mujer del Sudán del Sur (SSWEN), antes del referendo sobre la independencia del Sudán del Sur organizamos
una conferencia conjunta con mujeres del Norte para incorporar la
agenda de las mujeres en los arreglos posteriores al referendo.[6] El
enfoque de esta reunión fue la participación de las mujeres en las
negociaciones – preguntando cómo podíamos organizarnos como mujeres de
ambos países y manifestar nuestras preocupaciones.
En ese tiempo,
las partes del norte y del sur estaban negociando los arreglos
posteriores al referendo pero no había mujeres involucradas en estas
discusiones, e incluso ahora no hay ni una sola mujer en la delegación
del Partido del Congreso Nacional. Algo parecido ocurre en el Movimiento
de Liberación del Pueblo de Sudán (SPLM), en cuya delegación hay
únicamente cinco mujeres entre 45 integrantes. Enviamos una carta al ex
Presidente de Sudáfrica, Thabo Mbeki, jefe del Panel de Implementación
de Alto Nivel de la Unión Africana (AUHIP), quien estaba mediando las
negociaciones, y le solicitamos que incluyera a más mujeres en la mesa
de negociación, pero no tomó en cuenta nuestra petición. E incluso en
las actuales negociaciones sobre la frontera, las reservas de petróleo y
algunas áreas disputadas aún participan muy pocas mujeres. Así que las
mujeres estamos uniéndonos de nuevo y pidiendo participar en las
negociaciones para que tengamos voz en lo que está sucediendo.
También
tenemos un foro en línea en el cual mujeres del norte y del sur hablan
sobre asuntos generales y se solidarizan mutuamente. Lo que realmente
necesitamos es que las mujeres de ambos países nos unamos para analizar
este conflicto, y nuestros puntos de vista deben ser considerados porque
somos afectadas por el conflicto en muchas maneras diferentes.
AWID:
Ha habido un gran conflicto entre los dos países desde la secesión.
¿Cómo ha afectado esto a las mujeres y cuál es la situación ahora?
LR: Destruir
toma poco tiempo, pero reconstruir requiere mucho tiempo. Como
resultado de años de conflicto, las mujeres del Sudán del Sur quedaron
muy traumatizadas porque fueron raptadas, violadas, desplazadas y
discriminadas. Pero ahora las vemos y están sonriendo pues hay esperanza
de un mejor futuro. Aunque no ha habido muchos cambios (todavía no hay
suficientes centros de salud y aún enfrentamos numerosos retos, como ya
mencioné), ellas ven una luz al final del túnel y toda la gente la
vemos. No imagino que podamos alcanzar todo en un año (muchas cosas
fueron destruidas durante los 22 años de conflicto y la reconstrucción
tomará tiempo) pero estamos dando pequeños pasos hacia el cambio que
deseamos.
Notas:
- Ver: ‘Sudán del Sur: ¿Qué significará la independencia para las mujeres?’, Kathambi Kinoti, Notas de los Viernes de AWID, 11 de marzo de 2011.
- Ver: Naciones Unidas, Proyecto de documento del programa para la República de Sudán del Sur (2012-2013), párrafo 9 (DP/DCP/SSD/1), 29 de noviembre de 2011.
- Ver: ‘South Sudanese women call for greater participation in constitutional review’ [Mujeres sudsudanesas exigen mayor participación en revisión constitucional],Ngor Arol Garang, Sudan Tribune, 26 de enero de 2012.
- Cámaras alta y baja combinadas.
- “Artículo 19: Derecho a formar una familia: Toda persona en edad de contraer matrimonio tendrá derecho a casarse con otra del sexo opuesto y formar una familia de conformidad con sus respectivas leyes de familia, y no se celebrará el matrimonio sin el consentimiento libre y pleno del hombre y la mujer que desean casarse.”
- Ver: ‘Mujeres en Sudán del Sur se movilizan a través de partidos políticos’, Red de Mujeres por la Democracia, 7-9 de octubre de 2011.
Por Susan Tolmay
Fuente:
Notas de los Viernes de AWID, 3 de agosto de
2012. Título original: ‘In Spite of the Many Ongoing Challenges there
is Hope for Women in South Sudan’
Traducción: Laura E. Asturias