septiembre 04, 2021

Impiden talibanes labor periodística de mujeres



A pesar de que los talibanes aseguraron respetar la libertad de prensa y la participación de las mujeres en los medios de comunicación, menos de 100 ciudadanas ejercen el periodismo en la actualidad en Afganistán debido a que este grupo extremista les impidió su labor y solicitó que fueran reemplazadas o despedidas si la empresa no quería ser clausurada o agredida.

En un comunicado, la organización de Derechos Humanos, Reporteros Sin Fronteras (RSF) reportó que con la llegada de los talibanes a Kabul, Afganistán, de las 700 mujeres que ejercían el periodismo, menos de 100 están activas en emisoras de radio y canales de televisión privados, ya que los talibanes comenzaron a acosar a sus empresas y las amenazaron de cerrarlas sino las despedían.

RSF enfatizó que aunque el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid garantizó días posteriores a su llegada a Kabul (15 de agosto) que los derechos de las mujeres serían respetados y que todas podían “volver al trabajo en unos días”, esto no ha sido así, hasta el momento no se ha anunciado ninguna acción en ese sentido, lo que condena a cientos de afganas a un futuro incierto de penuria económica. 

Esta organización detalló que en 2020 había 108 medios de comunicación en Kabul, en los que trabajaban 4 mil 940 personas, de las cuales mil 80 eran mujeres, de ellas 700 se desempeñaban en el periodismo, sin embargo, las medidas extremas implementadas por los talibanes ha puesto en riesgo los Derechos Humanos, vida y seguridad económica de estas comunicadoras. 

Ejemplo de ello, comentó RSF, son los canales de televisión privada como “Tolonwes”, “Ariana News”, “Kabul News”, “Shamshad TV”, y “Khurshid TV”, en los que sus reporteras tuvieron la valentía de hablar en antena y salir a cubrir los sucesos cuando los talibanes llegaron a Kabul, pero fueron acosadas, agredidas o amenazadas por tropas de este grupo extremista. 

Dos casos más sobre ello, agregó RSF, es el de la reportera de la agencia de noticias “Pajhwok”, Nahid Bashardost, quien fue golpeada por los talibanes mientras realizaba un reportaje cerca del aeropuerto de Kabul y un grupo de mujeres periodistas contó que los talibanes se rieron de ellas y las amenazaron de impedir su trabajo si salían a cubrir los acontecimientos. 

En suma, resaltó RSF, una presentadora de la “Radio Televisión de Afganistán” (RTA) fue sustituida por un hombre talibán, luego de que su empresa le pidiera “quedarse en casa unos días”, y a otra presentadora se le negó la entrada al edificio. La RTA, dijo RSF, empleaba a 140 periodistas hasta mediados de agosto, ahora “ninguna de ellas se atreve a volver a trabajar en los canales de televisión, que están bajo control de los talibanes”. 

RSF resaltó que los directivos y editores de los medios de comunicación privados en Kabul que aún no han dejado de operar, confirmaron que, bajo presión, han aconsejado a las periodistas que se queden en casa. Por su parte, canales de televisión como “Zan TV” y “Bano TV”, que tenían contenido dirigido hacia las mujeres cesaron actividades por temor desde el 15 de agosto, fecha en la que llegaron los talibanes. 

Estos dos canales privados, enfatizó RSF, empleaban a 35 mujeres y 47 periodistas. “Era el trabajo perfecto para mi. Quería ayudar a las mujeres. Ahora no sé si podré volver a trabajar, declaró una periodista RSF que se desempeñaba en “Zan TV” y “Bano TV”. 

“El respeto de los talibanes al derecho fundamental de las mujeres, incluidas las periodistas, a trabajar y ejercer su profesión es una cuestión clave. Las periodistas deben poder reanudar su trabajo sin ser acosadas lo antes posible, porque es su derecho más básico, porque es esencial para su sustento, y también porque su ausencia del panorama mediático tendría el efecto de silenciar a todas las afganas”, declaró el secretario general de RSF, Christophe Deloire. 

RSF señaló que más de mil 700 periodistas se han visto obligadas a dejar de trabajar en las provincias de Afganistán (Herat, Balkh, entre otras) donde casi todos los medios de comunicación privados dejaron de funcionar ante el avance de las tropas de los talibanes. No obstante, dijo, algunas de ellas se mantienen aún en resistencia y laboran desde casa a fin de visibilizar su voz e información recabada. 

El pasado 24 de agosto, la Alta Comisionada de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet declaró que “una línea roja fundamental será el trato de los talibanes a las mujeres y niñas, y el respeto de sus derechos a la libertad, la educación, la autoexpresión, y el empleo”. 

En la actualidad, Afganistán ocupa el puesto 122 de 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de 2021,que RSF publicó en abril de 2021. Por su parte, la Alianza Global de Medios y Género (GAMAG) reportó que 4 mujeres periodistas fueron asesinadas y más de 300 ciudadanas han sido expulsadas de una pequeña comunidad de periodistas en Afganistán en los primeros tres meses de 2021. 

Ante este contexto, RSF llamó a los talibanes a reconocer los derechos de las mujeres, a cumplir con sus promesas, y a permitir que las periodistas regresen a sus labores con el fin de que su voz no sea silenciada.

Fuente: Cimac 

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