enero 12, 2023

España. Asociaciones feministas advierten de que los sistemas de valoración del riesgo de violencia machista “están fallando”


Más de 40 organizaciones de mujeres han presentado este miércoles un comunicado en el que piden que se les tenga en cuenta para el diseño de medidas de protección contra la violencia de género

Angela Alemany, de la asociación de mujeres juristas Themis, junto a la presidenta de la Fundación Mujeres, Elena Valenciano (a su derecha) y la jurista Marisa Soleto (a su lado), durante la rueda de prensa junto a numerosas organizaciones feministas.DANIEL GONZALEZ (EFE)


Con total repulsa han condenado las organizaciones feministas los asesinatos de mujeres que han ocurrido durante este inicio de año negro, en el que ya se contabilizan cuatro feminicidios. Más de 40 asociaciones que forman parte del Observatorio Estatal contra la Violencia de Género y del Consejo de Participación de la Mujer han organizado una rueda para alertar de la “gravedad” de las cifras, y urgir a las instituciones y a la ciudadanía a hacer “un esfuerzo adicional para erradicar y prevenir la violencia contra las mujeres”. Además, han lanzado un comunicado en el que exigen que se apliquen soluciones y que se cuente con ellas desde las instituciones para diseñar las medidas de protección.

Para las entidades, entre las que se encuentran la Fundación Mujeres y la Asociación de Mujeres Juristas Themis, el sistema de prevención y de valoración de riesgo ha “fallado alarmantemente” durante los últimos meses. De los 12 asesinatos ocurridos el pasado mes de diciembre, el 50% tenía denuncias previas por la pareja o expareja. De todos los feminicidios ocurridos en 2022, había denuncias en el 42,85% de los casos. “Si una mujer llama la atención, pone su caso ante la justicia y aun así no es ayudada, hay un fallo evidente”, ha incidido Ángela Alemany, de Themis. Para ello, piden que se cumplan estrictamente las medidas de vigilancia y control, incluyendo la evaluación continua del sistema VioGén.

Una de las soluciones en las que más han insistido es mejorar el sistema de Valoración de Riesgo Policial, en el que se ubica a las denunciantes en distintos niveles de peligro. “Si han asesinado a una mujer para la que se consideraba un ‘riesgo bajo’ o un ‘riesgo medio’, la valoración era claramente errónea. Esa mujer estaba en riesgo elevado”, ha explicado Alemany. Desde la organización han recordado que la situación de estas mujeres es especialmente difícil, y que una víctima que convive con un maltratador puede ver “debilitada su capacidad de decidir y actuar”, por lo que “es muy difícil para ellas medir el riesgo que realmente corren”, según ha explicado la presidenta de Fundación Mujeres, Elena Valenciano.

Para poder ayudar de manera eficaz a todas las víctimas, han exigido también un incremento en la inversión que dote de más medios técnicos y humanos a los Cuerpos de Fuerza y Seguridad del Estado, a quienes han reconocido su trabajo. Alemany ha apuntado que son muchas las mujeres que no pueden reconocerse como víctimas de violencia de género, por lo que son estas fuerzas, además de las judiciales, los profesionales “que tienen que atenderlas y actuar”. Con el fin de evitar cualquier agresión o asesinato machista, es necesario no minimizar el problema ni el propio criterio de la víctima, y aseguran que está en manos de la propia justicia “dar la protección necesaria”. “La violencia de género es un delito de oficio y debe perseguirse independientemente de lo que diga la víctima, porque no es ella quien tiene la prerrogativa, sino el Estado”, ha añadido la jurista.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha reconocido este miércoles por la mañana la necesidad de no ser “autocomplacientes” y ha admitido estar “absolutamente preocupada” ante el repunte de casos de feminicidios. La titular de Igualdad, entrevistada en la Cadena Ser, ha coincidido con las demandas de las asociaciones de mujeres, y ha incidido en la necesidad de aumentar la formación y la especialización, “no solo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sino también en Educación, Sanidad y Servicios Sociales”, con quienes ha asegurado que hay que trabajar para garantizar que se llega y se detectan precozmente todos los casos de violencia desde cualquier ámbito. Las asociaciones de mujeres han demandado, en la misma línea, una mejor formación con perspectiva de género de, no solo los operadores policiales, sino también de los jurídicos y sanitarios que se ocupan de la atención de las víctimas.

Por su parte, la fiscal de Sala de Violencia Contra la Mujer, Teresa Peramato, ha pedido este miércoles en un escrito a todos los fiscales “intensificar la acción proactiva” para la protección de las víctimas de violencia de género. Peramato ha resaltado dos principales propuestas: afianzar la solicitud de medidas cautelares que sean necesarias para la seguridad de las víctimas, aunque ellas no las pidan; y la instalación del dispositivo telemático de detección de la proximidad. Los colectivos feministas celebran la circular, que “emprende un camino adecuado”, e instan a reformar la coordinación judicial y policial.

Las asociaciones han demandado también que se les tenga en cuenta para el análisis y el diseño de medidas de protección contra la violencia de género, y que se cuente con su opinión como especialistas. “Entendemos que las instituciones deberían hacer un llamamiento a las asociaciones, pero muchas veces no se nos tiene en cuenta”, ha explicado Valenciano. La presidenta de la Fundación Mujeres ha recalcado el papel histórico de las organizaciones feministas y ha defendido que son quienes conocen el “día a día” de las víctimas. “Será muy difícil tener éxito sin contar con la capilaridad que dan todas estas asociaciones de mujeres, porque para muchas víctimas es mucho más fácil acercarse a nosotras en un primer momento”, ha expresado Valenciano.

Montero ha asegurado contar con estas asociaciones y ha querido reconocer su papel. “Algunas veces son la única mano tendida que esas mujeres han tenido, y las asociaciones feministas han estado ahí cuando las instituciones no estábamos dando respuesta adecuada, no estábamos a la altura”, ha señalado. Tanto desde las asociaciones como desde Igualdad han pedido “no mirar hacia otro lado” cuando se es consciente de una situación de violencia de género. “No normalicemos unos gritos, no normalicemos un empujón. Ante la más mínima señal, hagámosle saber a esa mujer que estamos a su lado, decida lo que decida”, ha expresado Montero.
Propuesta de avisos de Interior

La titular de Igualdad ha afirmado estar de acuerdo con el Ministerio de Interior en “la necesidad de poner el foco en los agresores”. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció este martes que están trabajando en la posibilidad legal de informar a las mujeres maltratadas cuando sus parejas tengan antecedentes por maltrato a otras víctimas. La propia Fiscalía de Sala de Violencia Contra la Mujer advirtió de que el procedimiento no se puede llevar a cabo de forma “automática” y “generalizada”, y que únicamente sería posible hacerlo si con el aviso pudiera reducirse el peligro que sufre la víctima.

La ministra de Igualdad ha recordado que hay que seguir estudiando la medida, pero ha incidido en que no hay medidas que sean “varitas mágicas”: “No hay una sola medida que pueda garantizar que vamos a acabar con todos los asesinatos, porque la violencia machista es estructural. No vamos a acabar con la violencia contra las mujeres hasta que no acabemos con el machismo. Eso no quiere decir que no podamos hacer nada”. Las asociaciones de mujeres han valorado la medida de Interior como cualquier medida que pueda ayudar a las mujeres que se encuentran en una situación de peligro, pero dudan de su efectividad. “Ojalá se pueda aplicar en los casos muy graves, pero en esas ocasiones ya se presupone que el agresor puede ser llevado a prisión, o que la víctima no va a volver con el maltratador”, han explicado. Sin embargo, han incidido de nuevo en que es necesario poner el foco en todas las mujeres que “ya estaban protegidas y, aun así, han sido asesinadas”.

Por Andrea García Baroja
Fuente: El País

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