Lucha por igualdad de género más allá de 2015
Vencido el plazo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) en 2015, la igualdad de género debe erigirse como un objetivo independiente de la Agenda para el Desarrollo Sostenible posterior a ese año, de acuerdo con una propuesta lanzada por la agencia ONU-Mujeres.
La iniciativa precisa tres áreas específicas: la protección frente a la violencia contra las féminas (adultas y niñas) y la igualdad en la distribución de capacidades en diversos sectores, y en los escaños de decisión en las instituciones públicas y privadas.
En el segundo aspecto, la idea se refiere a los campos del conocimiento, la salud en general, así como la sexual y la reproductiva, los derechos reproductivos y la igualdad de género en el acceso a recursos y oportunidades.
Sobre este último punto, el documento subraya la tierra, el trabajo decente y equiparar los salarios entre mujeres y hombres para fomentar la seguridad económica y social de las primeras.
En cuanto a un mayor papel de ellas en la toma de decisiones, el proyecto incluye los parlamentos nacionales y consejos locales, los medios de comunicación y otros focos de la sociedad civil, y en la gestión y dirección de empresas y las comunidades.
Y aclara que junto con el objetivo independiente propuesto, el resto de las metas para después de 2015 deben contener también todas las cuestiones de igualdad de género.
El propósito general es impulsar ese tema y garantizar la adopción de medidas concretas que permitan a las mujeres y las niñas vivir como ciudadanas plenas en igualdad en todo el mundo, dijo la directora interina de la agencia, Lakshmi Puri.
La agenda Post-2015 debe dar continuidad al trabajo desplegado en los denominados Objetivos de Desarrollo del Milenio, establecidos por la ONU en 2000 para ser cumplidos en 2015.
Esos desafíos persiguen reducir a la mitad la pobreza extrema y el hambre, lograr la enseñanza primaria universal y alcanzar la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer.
Las otras buscan disminuir la mortalidad infantil en dos tercios entre 1990 y 2015, mejorar la salud materna y combatir el VIH-sida, el paludismo y otras enfermedades.
Las restantes están vinculadas a la defensa del medio ambiente y al fomento de una asociación mundial para el desarrollo.
Para ONU-Mujeres, el trabajo hacia el logro de los ODM registró importantes avances, "aunque con resultados desiguales, como la falta de progreso en la reducción de la mortalidad materna".
Cerca de 800 mujeres mueren cada día por problemas vinculados al parto y complicaciones del embarazo, al tiempo que persisten las brechas salariales de género (féminas con remuneraciones entre un 10 y un 30 por ciento inferiores frente a los hombres).
Y solo hay una mujer por cada cinco legisladores en los parlamentos y casi dos tercios de trabajadoras están fuera de la protección de la ley, lo que evidencia la necesidad de enfrentar "las causas estructurales de la desigualdad de género".
Hace un año, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, creó un llamado panel de 27 personas eminentes, entre ellas 14 mujeres, encargadas de diseñar el programa posterior a 2015.
Los miembros femeninos son la ministra de Medio Ambiente de Brasil, Izabella Teixeira; la canciller colombiana, María Ángela Holguín; la presidenta de la Agencia de Medio Ambiente de Cuba, Gisela Alonso, y la ex titular del Exterior de México, Patricia Espinosa.
También la jefa de Estado de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf; la reina Rania de Jordania, Gunilla Carlsson (Suecia), Tawakel Karman (Yemen), Graca Machel (Mozambique), Betty Maina (Kenya), Elvira Nabiullina (Rusia), Ngozi Okonjo-Iweala (Nigeria), Emilia Pires (Timor-Leste) y Amina J. Mohammed (Nigeria).
ONU-Mujeres comenzó su trabajo en enero de 2011 y su primera directora ejecutiva fue la exmandataria chilena Michelle Bachelet, quien abandonó el cargo en marzo pasado para incorporarse en su país a la contienda electoral por la presidencia.
La agencia agrupó al Fondo para el Desarrollo de la Mujer, la División para el Avance de la Mujer, el Instituto Internacional de Investigaciones y Capacitación para la Promoción de la Mujer y la Oficina del Asesor Especial en Asuntos de Género.
El aparato fue creado por un acuerdo de la Asamblea General en julio de 2010 y funciona gracias a contribuciones voluntarias y un presupuesto de 500 millones de dólares establecido por la organización mundial.
Según sus estatutos, ONU-Mujeres tiene entre sus objetivos proveer respaldo técnico y financiero a los países para sus planes vinculados al desarrollo de la mujer y ayudar a órganos intergubernamentales a diseñar políticas y normas en la materia.
Por Víctor M. Carriba Jefe de la corresponsalía de Prensa Latina en Naciones Unidas.
Fuente: Prensa Latina